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La función profética de la educación teológica evangélica en América Latina



La importancia de "educar" como una función profética es, sin duda, un tema crucial y de máxima actualidad. En un entorno eclesial un tanto caótico y alarmante, donde numerosos autoproclamados “profetas” con falsas predicciones, doctrinas dudosas y, a veces incluso, conductas cuestionables ponen en entredicho la realidad de ese ministerio bíblico y desacreditan ante el mundo la imagen del verdadero evangelio.

El presente libro afirma que, en base al texto de las Escrituras, la “función profética” es algo mucho más amplio y complejo y abarca no solamente la denuncia del mal, sino también el llamado al arrepentimiento, el anuncio de juicio para el pueblo de Dios y para sus enemigos, el anuncio de restauración después del juicio y la presentación de una nueva realidad futura acorde con los valores del Reino de Dios. Considera que la misión del profeta es también de carácter utópico y soñador, que los profetas sueñan con un nuevo mundo e invitan a sus oyentes y lectores a soñar juntamente con ellos, algo que el teólogo norteamericano Walter Brueggemann –cuyos conceptos el autor usa como marco teórico de su investigación– define como «imaginación profética».

En consecuencia, entiende que es misión de la educación teológica comunicar esa “imaginación profética”, por lo que los educadores teológicos y la educación teológica –como función de la Iglesia– deben constituirse en profetas contemporáneos.

Pensado en primera instancia para el mundo académico pero que, debido a la importancia y al realismo de sus denuncias y recomendaciones, todo líder y toda persona involucrada en ministerios cristianos en America Latina debería leer sin falta.
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En un entorno eclesial un tanto caótico y alarmante, donde numerosos autoproclamados “profetas” con falsas predicciones, doctrinas dudosas, y a veces incluso conductas cuestionables, ponen en entredicho la realidad de ese ministerio bíblico y desacreditan ante el mundo la imagen del verdadero evangelio. Mientras algunas corrientes contemporáneas de pensamiento, como la teología conciliar y la Teología de la Liberación, limitan por un lado el sentido de voz profética a la denuncia por parte de la Iglesia de las injusticias sociales; mientras por el otro el evangelicalismo dispensacionalista ve la profecía casi exclusivamente en términos de los «eventos del porvenir», es decir, lo que sucederá al final de los tiempos; el tema de la función profética de la educación teológica, es, sin duda, un tema crucial y de la máxima actualidad.

El presente libro –basado en la tesis doctoral de su autor– afirma que en base al texto de las Escrituras, la “función profética” es algo mucho más amplio y complejo, y abarca no solamente la denuncia del mal, sino también el llamado al arrepentimiento, el anuncio de juicio para el pueblo de Dios y para sus enemigos, el anuncio de restauración después del juicio y la presentación de una nueva realidad futura acorde con los valores del Reino de Dios. Considera que la misión del profeta es también de carácter utópico y soñador, que los profetas sueñan con un nuevo mundo e invitan a sus oyentes y lectores a soñar juntamente con ellos, algo que el teólogo norteamericano Walter Brueggemann –cuyos conceptos el autor usa como marco teórico de su investigación– define como «imaginación profética». Y en consecuencia, entiende que es misión de la educación teológica comunicar esa “imaginación profética”, por lo que los educadores teológicos y la educación teológica, como función de la Iglesia, deben constituirse en profetas contemporáneos.

Denuncia que la finalidad última de la educación teológica actual, casi siempre se centra en formar graduados que funcionen en el sistema eclesiástico imperante; que las instituciones teológicas se limitan a la transmisión, protección y reproducción de los valores eclesiásticos y culturales tradicionales, sin cuestionarlos o plantearse cambiarlos; que se enseña el texto bíblico como mero estudio técnico, sin que los educadores se percaten de las implicaciones proféticas de ese mismo texto para el mundo contemporáneo y las transmitan a sus alumnos; y que muchas de las estrategias, metodologías y prácticas ministeriales que se explican, provienen del mundo de las ciencias sociales, alejado de la Biblia. Urge, por tanto, fijar la meta de una educación teológica misional con la voz profética como eje central. Y para alcanzar ese propósito propone cambios en las instituciones de educación teológica y en las funciones de los educadores teológicos como individuos.

Después de una extensa exposición introductoria, divide la obra en tres bloques:

El primero (capítulos 2 y 3) lo dedica a la investigación bíblica del tema. Analiza la función profética tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento y sus implicaciones para la educación teológica evangélica en América Latina. La metodología incluye un diálogo constante entre el texto bíblico y su mundo y el contexto social, eclesiástico e institucional del presente, planteando las situaciones paralelas entre el mundo bíblico y el mundo de hoy. Los ejemplos y comparaciones prácticas concretas que presenta, como pueda ser el caso de la idolatría, resultan ciertamente sorprendentes.

El segundo bloque (capítulo 4) trata el tema la función profética desde la perspectiva histórica y contextual. Analiza la forma en que la cuestión ha sido abordada por la Iglesia en el pasado reciente, así como la manera en que las instituciones de educación teológica han visto esta función. Presenta el desarrollo histórico esa función en la educación teológica, con un vistazo breve a la situación en la Edad Media, un poco más amplio para la Reforma protestante y mucho más extenso en lo que respecta a la época moderna y contemporánea. Expone la situación actual del debate y presenta algunos casos contemporáneos en que esa función se puede observar,

En el tercer y último bloque (capítulo 5) plantea sus conclusiones y propuestas. Hace una recopilación de la expuesto y a partir de ella propone abiertamente recomendaciones diversas: Teológicas, que afectan a los contenidos, la temática y el enfoque de las materias de teología que se enseñan en las instituciones de educación teológica; respecto al estudio del texto bíblico, para dejarlo que hable proféticamente en el presente a través de los profesores-profetas y de los estudiantes; y también sobre el currículo, su evaluación y modificación a la luz de los descubrimientos de la presente investigación.

Finalmente presenta las implicaciones de la función profética de la educación teológica en las estructuras organizacionales de las instituciones y de las iglesias, y propone algunos cambios radicales que estima necesarios para alcanzar la meta de una educación teológica misional con la voz profética como eje central.

Estamos ante una obra académica, bien escrita y bien documentada, con un amplio aparato de notas al pie y una bibliografía temática casi exhaustiva. Ciertamente, un libro erudito, pero fascinante, que presenta casos concretos y aporta propuestas reales y prácticas sobre un tema inédito y poco debatido, pero importantísimo. Pensado en primera instancia para el mundo académico, pero que debido la importancia y realismo de sus denuncias y recomendaciones, todo líder, todo los pastor, y toda persona involucrada en ministerios cristianos en America Latina, debería leer sin falta.
Información adicional
ISBN 9788482677293
Autor Suazo Jiménez, David
Encuadernación Rústica fresada
Publicacion 2012
Idioma es
Páginas 248
Medidas 15 x 23 cm