North, Brownlow
Nace el 6 de enero de 1810 en Chelsea (Winchester, Inglaterra), en el seno de una familia perteneciente a a la alta aristocracia inglesa. Su abuelo, obispo anglicano de Winchestr, era hijo de Lord North, Primer Ministro y líder parlamentario durante el siglo XVIII. Su padre, pastor anglicano, murió en 1825. Su madre, mujer de notables virtudes cristianas, intentó educar a su hijo en una fe viva, pero sin conseguirlo. Sus oraciones se verían cumplidas cuando el objeto de sus oraciones tenía 45 años.
Buen atleta y mal estudiante disipó su vida en juegos, carreras, caza y diversión. Estudió seis años en Eton. En diciembre de 1828, no habiendo cumplido 19 años se casó con la joven irlandesa Grace Anne, de Galway, hija de Thomas Coffey, doctor en teología.
Aficionado al juego se endeudó en más de lo que podía pagar, por lo que un tiempo tuvo que huir y servir como soldado voluntario en el ejército de un tal Don Pedro de Portugal. Más tarde se afincó en Escocia, donde pasaría el resto de su vida. En 1839 y debido a la enfermedad de su segundo hijo pensó seriamente en ser ministro del Evangelio.
Marchó a Oxford (Inglaterra) donde se matriculó en Magdalen Hall, graduándose en 1842. Al no haber habido renovación de corazón bien pronto volvió a la vida vieja de diversión y apuestas. El día de su verdadera conversión o nueva nacimiento llegó en noviembre de 1854, cuando enfermo y creyendo que iba a morir, clamó por misericordia a Dios confesando sus pecados y reconociendo la muerte propiciatoria de Jesucristo.
A partir de entonces un nuevo hombre se presentó ante sus incrédulos amigos y familiares. Poco a poco comenzó a testificar de su nueva fe, dando testimonio de ella en cuantos lugares le dejaban, principalmente en las congregaciones de la Iglesia Libre de Escocia. Su nombre se hizo popular y famoso como salvador de almas.
En Mayo de 1859 la Asamblea General de la Iglesia Libre de Escocia le admitió oficialmente como evangelista. El Dr. William Cunningham (1805-61), Moderador aquel año, le dio “la diestra de compañerismo”. North pronunció una tremenda alocución instando a la oración y la fidelidad, haciendo referencia al elevado número de ministros de la Iglesia que blasfeman contra el Espíritu Santo al jurar que son llamados por Dios a la obra del pastorado y salvación de almas, cuando en realidad ellos saben que están mintiendo.
Ese mismo año de 1859 fue el año del gran avivamiento en Irlanda del Norte. North fue invitado a predicar con tal motivo. Durante los meses de julio y agosto predicó sin cesar a lo largo y ancho de Ulster. Miles de personas se congregaban para escucharle. Muchas fueron salvas. Su ministerio fue muy solicitado en Inglaterra y Escocia, que al año siguiente iba a ser testigo de un nuevo avivamiento espiritual. Casi al final de su vida conoció al famoso evangelista americano D. L. Moody (v.), que estaba de gira evangelística en Glasgow. El 9 de noviembre de 1875 partía para estar con su Señor.
Buen atleta y mal estudiante disipó su vida en juegos, carreras, caza y diversión. Estudió seis años en Eton. En diciembre de 1828, no habiendo cumplido 19 años se casó con la joven irlandesa Grace Anne, de Galway, hija de Thomas Coffey, doctor en teología.
Aficionado al juego se endeudó en más de lo que podía pagar, por lo que un tiempo tuvo que huir y servir como soldado voluntario en el ejército de un tal Don Pedro de Portugal. Más tarde se afincó en Escocia, donde pasaría el resto de su vida. En 1839 y debido a la enfermedad de su segundo hijo pensó seriamente en ser ministro del Evangelio.
Marchó a Oxford (Inglaterra) donde se matriculó en Magdalen Hall, graduándose en 1842. Al no haber habido renovación de corazón bien pronto volvió a la vida vieja de diversión y apuestas. El día de su verdadera conversión o nueva nacimiento llegó en noviembre de 1854, cuando enfermo y creyendo que iba a morir, clamó por misericordia a Dios confesando sus pecados y reconociendo la muerte propiciatoria de Jesucristo.
A partir de entonces un nuevo hombre se presentó ante sus incrédulos amigos y familiares. Poco a poco comenzó a testificar de su nueva fe, dando testimonio de ella en cuantos lugares le dejaban, principalmente en las congregaciones de la Iglesia Libre de Escocia. Su nombre se hizo popular y famoso como salvador de almas.
En Mayo de 1859 la Asamblea General de la Iglesia Libre de Escocia le admitió oficialmente como evangelista. El Dr. William Cunningham (1805-61), Moderador aquel año, le dio “la diestra de compañerismo”. North pronunció una tremenda alocución instando a la oración y la fidelidad, haciendo referencia al elevado número de ministros de la Iglesia que blasfeman contra el Espíritu Santo al jurar que son llamados por Dios a la obra del pastorado y salvación de almas, cuando en realidad ellos saben que están mintiendo.
Ese mismo año de 1859 fue el año del gran avivamiento en Irlanda del Norte. North fue invitado a predicar con tal motivo. Durante los meses de julio y agosto predicó sin cesar a lo largo y ancho de Ulster. Miles de personas se congregaban para escucharle. Muchas fueron salvas. Su ministerio fue muy solicitado en Inglaterra y Escocia, que al año siguiente iba a ser testigo de un nuevo avivamiento espiritual. Casi al final de su vida conoció al famoso evangelista americano D. L. Moody (v.), que estaba de gira evangelística en Glasgow. El 9 de noviembre de 1875 partía para estar con su Señor.