Morris, Henry Madison
Estudió ingeniería en el Rice Institute (1939) y en la Universidad de Minnesota (1948), con mención especial. Ha ocupado diversos cargos al frente de distintos departamentos del Estado americano en relación a su profesión. Es miembro de la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles, la Sociedad Americana de Educación de Ingeniería, la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, la Sociedad Nacional de Ingenieros Profesiones, la Academia de Ciencia de Illinois, la Unión Americana Geofísica y la Afiliación Científica Americana.
Influenciado por el antievolucionista George McCready Price, adventista del séptimo día, Morris ha contribuido a generar un interés universal por el teoría moderna del creacionismo-bíblico-científico, mediante su libro El Diluvio en el Génesis, publicado originalmente en 1961 en colaboración con el teólogo John Whitcomb (v.), aunque ya en 1951 había escrito un libro popular sobre el tema, asentando las premisas básicas de lo que después iba a desarrollar en un buen número de libros.
La teoría creacionista-científica representa una alternativa a la teoría evolucionista, a la que opone: un Universo con no más de 10.000 años; la creación de todas los tipos básicos de seres vivientes en seis días de veinticuatro horas; el diluvio universal como explicación de los estratos geológicos.
Como resultado de sus actividades en este sentido, se formó en 1972 el Institute for Creation Research (Instituto para el Estudio de la Creación), con él como Presidente. Instituciones similares se han extendido por todo el mundo, incluyendo Rusia.
M. cree que “la eseñanza evolucionista no es sólo sociológicamente dañina, sino también científica e históricamente falsa” (Scientific Creationism, 1974). Sus ideas han sido especialmente bien recibidas por el movimiento fundamentalista evangélico y conservador.
Influenciado por el antievolucionista George McCready Price, adventista del séptimo día, Morris ha contribuido a generar un interés universal por el teoría moderna del creacionismo-bíblico-científico, mediante su libro El Diluvio en el Génesis, publicado originalmente en 1961 en colaboración con el teólogo John Whitcomb (v.), aunque ya en 1951 había escrito un libro popular sobre el tema, asentando las premisas básicas de lo que después iba a desarrollar en un buen número de libros.
La teoría creacionista-científica representa una alternativa a la teoría evolucionista, a la que opone: un Universo con no más de 10.000 años; la creación de todas los tipos básicos de seres vivientes en seis días de veinticuatro horas; el diluvio universal como explicación de los estratos geológicos.
Como resultado de sus actividades en este sentido, se formó en 1972 el Institute for Creation Research (Instituto para el Estudio de la Creación), con él como Presidente. Instituciones similares se han extendido por todo el mundo, incluyendo Rusia.
M. cree que “la eseñanza evolucionista no es sólo sociológicamente dañina, sino también científica e históricamente falsa” (Scientific Creationism, 1974). Sus ideas han sido especialmente bien recibidas por el movimiento fundamentalista evangélico y conservador.