Minucio Félix
Apologista de origen africano y educación pagana, debió de convertirse tardíamente al cristianismo. Jerónimo le llama “abogado insigne de Roma”.
Nada más sabemos con certeza de su vida, excepto que escribió una obra titulada El Octavio, donde viajando de camino a Ostia se entabla una conversación entre Cecilio, un gentil, y Octavio, un cristiano, sobre la verdad del Evangelio. En ella Minucio establece las verdades fundamentales de la unidad de Dios, la inmortalidad del alma y demuestra la pureza de la moral cristiana.
Nada más sabemos con certeza de su vida, excepto que escribió una obra titulada El Octavio, donde viajando de camino a Ostia se entabla una conversación entre Cecilio, un gentil, y Octavio, un cristiano, sobre la verdad del Evangelio. En ella Minucio establece las verdades fundamentales de la unidad de Dios, la inmortalidad del alma y demuestra la pureza de la moral cristiana.