Castro, Emilio
Nació en Montevideo (Uruguay). Después de haber realizado allí su educación general se trasladó a Buenos Aires (Argentina), para estudiar en la Facultad Evangélica de Teología, hoy Instituto Superior de Estudios Teológicos. Cursó estudios en la Universidad de Basilea (Suiza, 1953-54), donde tuvo a Karl Barth por profesor, cuya teología iba a guiar su futuro pensamiento. Obtuvo su doctorado en teología en la Universidad de Laussanna.
Casado con Gladys Nieres marcharon como misioneros a Bolivia. De regreso a su país natal fue pastor de la Iglesia Metodista en zonas rurales y urbanas. En 1969 fue nombrado primer presidente de la Iglesia Metodista de Uruguay. En 1971 fue encarcelado por querer mediar entre la guerrilla y las fuerzas del gobierno uruguayo, a raíz del secuestro de un miembro de la embajada estadounidense. Expulsado del país se exilió en Suiza (1972). Entonces fue invitado por el Concilio Mundial de Iglesias (CMI) a dirigir la Secretaría de Misión mundial y Evangelización, cargo que ocupó hasta 1984. Un año después sería elegido Presidente del CMI. Asimismo había sido Secretario ejecutivo de la Asociación Sudamericana de Instituciones Teológicas (ASIT) y miembro de la Secretaria general de Unidad Pro-Evangélica Latinoamericana (UNELAM, 1965-72). Editor adjunto de la revista americana The Christian Century y director de The Christian Review of Missions.
Es un brillante predicador y conferenciante, habiéndose destacado por su vocación ecuménica y su profundo interés en los problemas sociopolíticos da nivel latinoamericano y mundial. Desde muy joven ha participado en encuentros ecuménicos en todo el mundo. En su opinión la evangelización debe ir unida a la teología de la liberación.
Casado con Gladys Nieres marcharon como misioneros a Bolivia. De regreso a su país natal fue pastor de la Iglesia Metodista en zonas rurales y urbanas. En 1969 fue nombrado primer presidente de la Iglesia Metodista de Uruguay. En 1971 fue encarcelado por querer mediar entre la guerrilla y las fuerzas del gobierno uruguayo, a raíz del secuestro de un miembro de la embajada estadounidense. Expulsado del país se exilió en Suiza (1972). Entonces fue invitado por el Concilio Mundial de Iglesias (CMI) a dirigir la Secretaría de Misión mundial y Evangelización, cargo que ocupó hasta 1984. Un año después sería elegido Presidente del CMI. Asimismo había sido Secretario ejecutivo de la Asociación Sudamericana de Instituciones Teológicas (ASIT) y miembro de la Secretaria general de Unidad Pro-Evangélica Latinoamericana (UNELAM, 1965-72). Editor adjunto de la revista americana The Christian Century y director de The Christian Review of Missions.
Es un brillante predicador y conferenciante, habiéndose destacado por su vocación ecuménica y su profundo interés en los problemas sociopolíticos da nivel latinoamericano y mundial. Desde muy joven ha participado en encuentros ecuménicos en todo el mundo. En su opinión la evangelización debe ir unida a la teología de la liberación.